En año 2010 se recogieron un total de 32.226,42 toneladas de la fracción resto (no selectiva), 301,86 (0,91%) menos que el año pasado, con un ratio de 502 kilogramos por habitante y año, frente a los 509 del 2010. Esta disminución en la cantidad de RSU recogidos, a pesar del incremento de población interanual en 194 habitantes (0,3 %), puede tener como causa la recesión económica en las que estamos inmersos que afecta al consumo y por ende a la generación de residuos. Paralelamente también la cantidad de chatarra y enseres domésticos ha disminuido, con un total de 1.726 toneladas en 2010, frente a las 1.769 del 2009, situando la ratio de kilogramos por habitante y año en 27, que corrobora la hipótesis anterior en cuanto al consumo. En la recogida selectiva se obtuvieron resultados dispares, si bien hubo un incremento significativo en la recogida de las fracciones de envases ligeros, para el papel y cartón, tanto de aportación ciudadana mediante contenedor tipo iglú como en la recogida puerta a puerta del cartón comercial, se registró una caída en las cantidades recogidas por segundo año consecutivo. De la fracción de envases ligeros en el año 2.010 se recogió un 26 % más con respecto al 2009, con 303.034 Kg. que supone una ratio de 4,72 kilogramos por habitante y año. 482.750 y 82.590 Kg. de papel y cartón se recogieron procedentes de la recogida mediante contenedor y puerta a puerta, respectivamente. Esto supone una disminución con respecto al año 2009 de un 16 % para el procedente de la aportación ciudadana, que supone 7,53 Kg. por habitante y año, y 26 % en la recogida del cartón comercial. La generación de este último tipo de residuo puede ser un indicador del consumo y por tanto, del estado de la economía en la comarca.